¡Curioso! He comenzado dando la explicación de lo que todavía no he explicado, de lo que supongo, que igual que a mí a mucha gente le corroe por dentro.
Desde siempre los seres humanos hemos tendido a querer más. Más posesiones materiales, un mejor estatus, etc... Y desde épocas inmemoriales, ha sucedido lo mismo, quien más ha tenido, siempre es quien menos se conforma, aunque por supuesto hay excepciones.Desde mi punto de vista las religiones, que nacieron para calmar el ansia humana por querer saber y, por la necesidad de tener algo a lo que aferrarse, han sido hábilmente manipuladas al antojo de quienes en cada momento histórico han estado, por llamarlo de alguna manera, al mando de ellas.
En nombre de todos los dioses habidos y por haber se han cometido barbaries y atrocidades, que difícilmente hubiesen sido seguidas, ni apoyadas por los pueblos tan ciegamente, por patriotismo o cualquier otra causa.
En nombre de Dios se siguen cometiendo y se sigue manipulando a quienes a pies juntillas son fieles seguidores de estas doctrinas hábilmente manipuladas para su enseñanza.¿Y se ha manipulado para beneficio de quien? Para los feligreses no, desde luego, sino para el progresivo enriquecimiento de las jerarquías, para demostrase a sí mismos que su poder de manipulación no tiene límites.
Lo contradictorio aquí para mí es que en la religión católica dicha manipulación ha llegado hasta la política y en España el caso ya es de auténtico escándalo, a veces pienso que hasta Tor Quemada se llevaría las manos a la cabeza. Apoyaron a una dictadura, con Franco a la cabeza que se hizo con el poder tras un golpe de estado que condujo a una guerra civil de dos años. Ahora con absurdas proclamas se posturan ante lo que para ellos son inmoralidades. Y ante los ojos atónitos de quienes no podemos dar crédito a lo que vemos, piden públicamente el voto para un partido. Para un partido que representa todo lo contrario a lo que Jesús, cuyas enseñanzas dicen que siguen, predicaba, que no era otra cosa que vivir desde el amor y la igualdad entre las personas. Que todos tenemos los mismos derechos y obligaciones. Que nadie es más que otro ni por sexo, ni por raza, ni por ser hijo de...
Creo que desde el papa a cualquier obispo, e incluso algún que otro cura de pueblo, a pesar de los años de estudio, no han sabido captar el mensaje de su mesías. Y con el poder que les da el ser escuchados por quienes creen en su Dios, aprovechan para que estas personas no vean el verdadero mensaje que debería de transmitir una iglesia que dice seguir las enseñanzas del hijo del hombre. Un mensaje que nunca llegará a sus oídos de boca de los que deberían llevarlo. Sino que prefieren que miles o millones de personas mueran por el sida, porque ningún miembro de la iglesia es dueño de ninguna fábrica de preservativos, o por no sé qué moral, quizá la misma que permitiría nacer a un niño de una madre violada, o de una madre muerta, porque el nacimiento de su hijo le provocó la muerte a sabiendas de que pasaría.Son las contradicciones manipuladas que siempre ha habido y siempre habrá, mientras haya fe en el pueblo y maldad encubierta en quienes tienen un mínimo de poder y dicen ser los representantes de Dios en la tierra.
JJ Guerra. 2 de diciembre de 2011.
Me parece que es una gran verdad todo lo que dices, sin embargo, yo haría hincapié en algo que particularmente me indigna de la iglesia y es que no me explico por qué razón no condena con la misma contundencia y excomulga a tantos "católicos", entre comillas, que no sienten el menor reparo en enriquecerse sin compartir lo que tienen con el prójimo, a tantos que se sienten superiores por su posición social o no sé porqué otro motivo y basan su vida en aparentar ser lo que no son, preocupados por el prestigio y siendo completamente hipócritas. ¿Cómo es posible que recomienden que voten a la derecha siendo ésta y la política capitalista las principales causas de las desigualdades sociales, de la pobreza, la delincuencia, el desempleo e incluso de los miles de muertos de las guerras que provocan? Contradictorio, sí; no al aborto, no a los preservativos, vaya por Dios,entonces hay que votar al pp, a los que prohiben en lugar de dejar que se tenga libertad de conciencia, pero eso sí: SÍ A LAS GUERRAS, A LA CARRERA ARMAMENTÍSTICA Y LAS DESIGUALDADES SOCIALES,A LOS CRÍMENES DE LAS DICTADURAS QUE APOYAN, A LA MAFIA DEL VATICANO Y A LA HAMBRUNA? ¿Por qué no condenan el consumismo, el derroche, la avaricia, la envidia, la soberbia, el egoismo o la gula? Habría que hacer una redefinición de lo que significa la palabra AMOR, que desde luego está más cerca de la sexualidad, la cual forma parte de nuestra naturaleza y es de lo más sagrado que tenemos. Sin ella, con la nefasta abstinencia que predican, sólo se crean reprimidos y amargados tendentes a la violencia y poco tienen que aportar para crear un ambiente realmente amoroso.
ResponderEliminarAsí les va, que cada vez tienen menos sacerdotes. Que la Iglesia es el opio del pueblo ya lo dijo alguien antes que yo. Pero sigue siendo una verdad de hoy. La mejor manera que tienen de tener a los parias de la tierra callados y sin protestar ni erguirse contra "los de arriba" (con los que se sienten muy a gusto, por cierto) es explicando que "el dinero no da la felicidad" y que "nos espera el reino de los cielos" y que "venimos a este mundo a sufrir por el pecado de nuestros padres, para redimirnos" .
ResponderEliminarEs alucinante que en pleno siglo XXI sigan con esas memeces y la gente continue escuchándoles. Siglos atrás lo entiendo. La gente no tenía estudios, no leía, y no podía hacer otra cosa que creer a pie juntillas lo que dijeran éstos desde el púlpito. Pero hoy en día creo que las personas hemos acumulado una serie de conocimientos que deberia hacernos reflexionar sobre qué se cuece en el seno de todas las religiones.
Religiones que hablan de paz y apoyan (o no condenan) una guerra. Religiones que "alaban la pobreza" mientras ellos acumulan grandes riquezas. Condenan el uso del preservativo y cualquier cosa relacionada con el sexo y ellos violan todo lo que pueden.